El contexto económico global ha experimentado una pérdida de impulso en los últimos meses, lo que subyace en las últimas proyecciones de crecimiento, actualizadas en septiembre, de la OCDE y del Banco Central Europeo, que han restado una décima al avance del PIB mundial en comparación con lo que habían estimado en junio.
En el caso de la coyuntura económica española, la “inercia de los vientos de cola” permite que el crecimiento se sitúe todavía por encima del 3% y que la ralentización esperada en la actividad económica se posponga a 2017, con una previsión de avance del PIB del 2,3%.
El PIB ha crecido un 0,5% en el segundo trimestre de 2016 en Andalucía, la misma tasa que en el trimestre anterior. Este incremento ha sido medio punto inferior al del mismo trimestre de 2015, de ahí que la variación interanual se haya situado en el 2,8% (3,3% en el primer trimestre).
Las previsiones realizadas por Analistas Económicos de Andalucía mantienen el crecimiento del PIB andaluz en el 2,7% para el conjunto de 2016 y anticipan un crecimiento del empleo del 2,8% en el promedio de 2016 (2,6% en España).
En lo referente a las perspectivas para 2017, se prevé un crecimiento de la economía andaluza del 2,5% y una ralentización en el ritmo de crecimiento del empleo, con un aumento en el número de ocupados del 2,0%, que se debería al incremento en las actividades no agrarias.
En lo que respecta a las provincias andaluzas, las previsiones para el conjunto del año apuntan a una desaceleración en el ritmo de crecimiento de la actividad respecto al pasado año, estimándose un mayor crecimiento para Almería y Málaga (3,2% y 3,0%, respectivamente).